HAY VARIAS FORMAS DE EJERCER¿QUÉ ES?
Hostilidad verbal crónica: burlas, desprecio, insultos, menospreciarlo, avergonzarlo en público.
Disciplina severa, amenazas de castigos, amenazas de abandono.
Sobreprotección con limitación de la exploración y del aprendizaje. Exposición a episodios traumáticos. Condicionamiento del amor al comportamiento.Imposición de responsabilidades inapropiadas, como cuidar a hermanos menores sin la presencia de adultos.Aislamiento y limitación de su relación social
¿QUÉ LE PASA AL NIÑO?
El niño se siente despreciado sin poder comprender la situación, afectándose su autoestima. Los invade la vergüenza de no poder satisfacer los deseos de sus padres, repercutiendo en forma paradójica en el medio social o escolar. Con el afán de mostrarse amables y conciliadores los niños se convierten en seres emocionalmente inestables, pudiendo llegar inclusive a la auto agresión física. Tienen miedo y no pueden hablar sobre lo qué les pasa. Puede haber síntomas de estrés en el cuerpo: ahogo, fatiga, trastornos en el sueño y cefaleas.
¿QUÉ LES PASA A LOS PADRES?
Algunos proceden de esa forma por no estar informados sobre los cuidados y necesidades que tiene cada niño en relación a su edad. Algunos recuerdan y repiten los castigos impuestos por sus padres cuando eran niños. Se fijan expectativas proyectadas a sus hijos y piensan que se pueden cumplir apelando a amenazas, castigos o abandono. Otras veces los mismos padres se encuentran atravesando situaciones complejas que les impide reconocer la realidad y las cualidades del niño.
¿PUEDO YO, PADRE O MADRE ESTAR EJERCIENDO VIOLENCIA EMOCIONAL A MIS HIJOS SIN SABERLO?
Sí. En realidad es difícil no haber amenazado a algún hijo para que comiera, se fuera a la cama o no mirara TV. En la intensidad de estas conductas radicará el abuso como también en el análisis posterior de estos errores de crianza.